El mundo se desmoronaba poco a poco al comprobar día tras día que mi maravilloso hijo se escurría de entre mis manos, se escapaba sigilosamente abandonando todo lo que había aprendido hasta ese momento. Había sido atrapado por un inesperado alud de tinieblas llamado autismo.
1 comentario:
Juani, ahí vamos, buscando información. Bueno, a ver si es verdad que se sigue investigando. Un abrazo Juani. Que paséis una buena semana!!!
Publicar un comentario